Línea de base sobre situación física y organizativa de las escuelas del Cusco frente al riesgo de desastres

Con la participación de los directores escolares y el personal del área de Defensa Civil de las municipalidades, se ha levantado la línea de base del estado de situación física y organizacional de escuelas del Cusco para enfrentar situaciones de desastres, en especial ante la amenaza sísmica.

En coordinación con las Oficinas de Defensa Civil de los distritos de Saylla, Lucre y Oropesa y la participación de integrantes de las brigadas de gestión de riesgos de desastres, el personal técnico del Centro Guaman Poma visitó a 6 instituciones educativas para el levantamiento de información sobre el estado de situación física y organizacional de las escuelas para enfrentar situaciones de desastres, en especial ante la amenaza sísmica.

Si bien estas escuelas periurbanas son de alto riesgo dado que albergan a gran cantidad de población vulnerable, lo cierto es que no cuentan con presupuesto para mejorar sus condiciones físicas ni la preparación de la comunidad educativa para enfrentar situaciones de desastre.

Una cadena de responsabilidades delegadas desde el Estado coloca a las municipalidades distritales en la responsabilidad de atender a los centros educativos en situaciones de emergencia y a estas entidades en la responsabilidad de mantener sus instalaciones seguras, siendo en ambos casos que los recursos destinados para estos cometidos no existen o son muy limitados.

El levantamiento de información de base dio cuenta de 3 aspectos preocupantes y presentes en todas las instituciones:
– Las rutas de evacuación no son seguras y estas escasamente señalizadas
– Las instalaciones requieren mayor acondicionamiento.
– La población responsable carece de preparación.

El proyecto financiado por la Diputación de Córdoba a través de los ayuntamientos de Montilla, Montemayor, Moriles, Santaella y Nueva Carteya incidirá en mejorar los instrumentos de gestión y capacitar y preparar a la población, así como en colocar señalética suficiente para guiar la evacuación del alumnado hacia las zonas seguras; además facilitará un diagnóstico que permita a las ocho escuelas participantes gestionar recursos para priorizar algunas intervenciones físicas, siendo algunas de las más urgentes que no requieren mucho presupuesto:

– Despejar las rutas de evacuación de posibles elementos peligrosos.
– Fijar los estantes a las paredes en las aulas, oficinas, bibliotecas, almacenes, etc. para evitar que caigan sobre alumnado u obstruyan las rutas de evacuación.
– Cambiar el abatimiento de las puertas que se abren al interior de los ambientes hacia el exterior como establece la norma.
– Colocar láminas de seguridad en los vidrios encima de las puertas dado que al ser de vidrio simple podrían estallar en un eventual sismo.
– Dar mantenimiento a las estructuras de adobe existente.

Las y los directores que participaron en las inspecciones solicitaron la socialización del diagnóstico ante las Asociaciones de Madres y Padres de Familia – AMAPAFAS, pues estas instancias han respondido año a año a las demandas urgentes de las escuelas, apoyando con recursos o mano de obra, que en esta ocasión se canalizarían para mejorar la seguridad de la comunidad educativa, en especial ante el riesgo de sismo que es un peligro latente en Cusco como ciudad altamente sísmica.